miércoles, 15 de abril de 2020

Leonardo Da Vinci (1452-1519)


Leonardo nació el 15 de abril de 1452 en la villa toscana de Vinci, hijo natural de una campesina, Caterina y de Ser Piero, un rico notario florentino. Italia era entonces un mosaico de ciudades-estado como Florencia, pequeñas repúblicas como Venecia y feudos bajo el poder de los príncipes o el papa. En el contexto internacional, un años después de su nacimiento despareció el Imperio Romano de Oriente. Es un ambiente de violencia continúa y de luchas por el control de territorios.

Esfera de cobre de Sta Mª del Fiori
Fue aprendiz en el taller de Andrea de Verrochino, durante seis años para poder ser reconocido como artista libre, aquí aprendió pintura, escultura, técnicas y mecánicas de la creación artística. El primer trabajo del que se tiene noticia fue la construcción de la esfera de cobre proyectada por Brunelleschi para la iglesia de Santa Maria dei Fiori. Cerca del taller de Verrocchio, se encontraba el de Antonio Pollaiuolo, donde realizó los primeros estudios de anatomía y seguramente estudió latín y el griego.

En 1482 abandonó Florencia y se asentó en el Milán de Ludovico Sforza donde estuvo 17 años como «pictor et ingenierius ducalis». Su ocupación principal era la de ingeniero militar, aunque realizó proyectos de hidráulica, mecánica (con innovadores sistemas de palancas) y la arquitectura, además de la pintura y la escultura. La peste que asoló Milán y que Leonardo creía que se debía al hacinamiento y suciedad de la ciudad, por eso proyectó espaciosas villas, dibujó planos para canalizaciones de ríos e ingeniosos sistemas de defensa ante la artillería enemiga.

Virgen de las Rocas
En la década de 1490 comenzó a terminar una serie de estudios que se recopilarían en el Codex Atlanticus. No se preocupó por formar su propia escuela, pero en su taller milanés se creó un grupo de fieles aprendices y alumnos. Con anterioridad (1483) había recibido el encargo de la hermandad de la Inmaculada Concepción de realizar una pintura para la iglesia de San Francisco. Para ello pintó la Virgen de las Rocas, en dos versiones, que no estaría acabado hasta veinte años más tarde. En ambas versiones la estructura triangular de la composición, la gracia de las figuras y el brillante uso del famoso sfumato para realzar el sentido visionario de la escena lo que supuso una revolución estética para sus contemporáneos.

Hacia 1498 finalizaba una pintura mural,  para el refectorio del convento dominico de Santa Maria dalle Grazie, que lo convertiría en su consagración pictórica: La Última Cena.  Hay que esforzarse para entender el esplendor original, ya que se deterioró rápidamente y fue mal restaurada.
La última cena

En 1499 paso por Venecia (acosada por los turcos) como ingeniero militar, en poco tiempo creó una cantidad de artefactos cuya realización no llegaría a realizarse hasta los siglos XIX o XX.

Mona Lisa
En abril de 1500, Leonardo da Vinci regresó a Florencia. Durante esos años, siguió con sus tareas de ingeniero militar, pero ya era un consagrado pintor por lo que trabajó en obras como su Santa Ana, la Virgen y el Niño, Leonardo trabajó tres años en La batalla de Anghiari, que quedaría inconclusa Leda y el cisne. La obra cumbre de esta etapa (entre las pocas que acabó)) fue el retrato de Mona (abreviatura de Madonna) Lisa Gherardini, esposa de Francesco del Giocondo, la obra se conocería como la Mona Lisa o Giocconda. La obra se hizo famosa desde su creación y se convirtió en modelo de retrato. El cuadro está lleno de misterios, se conoce pocas cosas, ni siquiera quién encargó el cuadro, que Leonardo en sus últimos años, llevaría a Francia y se lo vendería al rey Francisco I por cuatro mil piezas de oro. Poco después, el 2 de mayo de 1519 murió en Clos Lucé, Amboise (Francia)

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